Buffel (Cenchrus ciliaris)
El zacate buffel es una especie nativa africana que se introdujo a sonora en los años 50 como forraje y también para el control de la erosión de suelos áridos.
Proviene de un clima aún más árido que el nuestro por lo que es resistente a las sequías, tiene raíz profunda que ayuda a retener el suelo, sirve como una alternativa de alimento para el ganado, y al ver estas cualidades, los productores de la región siguieron promoviendo su introducción durante varias décadas.
A esta especie se le han realizado varios análisis de riesgo, que identifican a la especie como invasora de alto impacto en muchos países, en México está reportada como especie invasora y plaga.
Una especie exótica invasora es toda aquella que no es nativa y que es capaz de sobrevivir, reproducirse y establecerse en hábitats y ecosistemas naturales y que amenaza la diversidad biológica nativa, la economía o la salud pública.
Las condiciones climatológicas de sonora son ideales para su desarrollo y propicia la invasión del ecosistema alterando los procesos naturales y desplazando la flora y fauna local ya que es una especie perenne de temporada cálida, puede llegar a formar densos matorrales con tallos de más de un metro de longitud. Estos tallos son capaces de producir una gran cantidad de semillas las cuales se esparcen fácilmente por acción del viento, agua, animales y maquinaria, etc. y pueden permanecer viables en el suelo durante cuatro años, ocupando áreas naturales, terrenos baldíos y carreteras para la colonización de nuevos hábitats.
Las plantas maduras son difíciles de controlar, ya que tienen facilidad de volver a crecer después del corte, el pastoreo o la quema, siendo esta última una práctica común para su control, convirtiéndola uno de los llamados más atendidos por los bomberos.
Debido a esas cualidades, después de una quema o incendio forestal, acaba con toda la flora y fauna a su paso dejando el terreno libre para su establecimiento.
Tiene el potencial de transportar otras especies invasoras y parásitos de impacto para la salud ya que es un buen anfitrión para la mosquita blanca, pulgones y garrapatas que transmiten virus y enfermedades a seres humanos y fauna silvestre.
En las ciudades como Hermosillo, esta especie también representa un problema no solo de estética, también económico representando una carga para el erario por los costos de mantenimiento en camellones, parques y jardines que realiza servicios públicos municipales, así como para los dueños de terrenos particulares.
Es por ello que el año que entra se buscara legislar el tema del buffel desde la cámara de diputados.
Por su parte el Colectivo Caminantes del Desierto desde sus inicios ha expuesto esta problemática, atacando el problema en la única área natural protegida del municipio de Hermosillo, conocida como el Parque Central o Cerro Johnson, realizando campañas de erradicación, o como nosotros le llamamos ‘CrossFit Sustentable’ por parte de sus miembros, vecinos, colaboraciones con otros grupos ambientalistas y ciudadanos voluntarios que acuden a las convocatorias, obteniendo resultados positivos al permitir que especies nativas vuelvan a ocupar el área que el buffel antes había invadido.